Inesperadamente, en una noche de fin de enero como es esta y, a punto de curiosear varios libros empezados ("Alguien anda en la escalera de incendios" de Harkaitz Cano; "La tienda de palabras" de Jesús Marchamalo; "Mil y un cuentos de una línea", selección de Aloe Azid) me encontré con la iniciativa de unos locos en este mundo con prisa: los comandos poéticos susurrantes. Para más información de esta experiencia de hombres y mujeres, paraguas y tubos largos de susurros entrar en: http://www.les-souffleurs.fr/
1 comentario:
Interesante propuesta
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